¿Repugnante decís?

Adjunto un correo que me llegó una mañana no muy lejana. Es una columna con esa espinita que algunos, afortunadamente, llevamos dentro.

“Algunas comentarios emitidos en el día de hoy han mostrado su sorpresa por el aspecto de las secuestradas y su familiaridad al despedirse de los guerrilleros de las FARC. Periodistas colombianos interrogaron sobre el tema al Canciller Araujo, quien no quiso emitir comentarios. Aleidy Coll, en una columna, se pregunta si podemos estar “ante un supremo montaje”.
Esta es su columna completa:

“No sé ustedes, amables lectores, pero la imagen de las ¿secuestradas? Doña Consuelo y Clara, no son los rostros y cuerpos de personas que han permanecido sufriendo seis años en cautiverio, en manos de las FARC que han asesinado a tantísimos colombianos”.

Clara Rojas, con moñera y perfecto corte de pelo se despidió hasta con un fuerte beso y apretón de aquellos guerrilleros ¿que la tuvieron como rehén a lo largo de seis calamitosos años? La vimos en mejor estado físico que cuando las FARC dieron la primera y segunda fe de vida.

La ex senadora Consuelo González de Perdomo también con un excelente corte de pelo y hasta arregladita con secador. Bien vestida y de excelente semblante. Maquillada de forma moderada y, en ningún momento dio muestras de preocupación por los seis años alejados de la familia.

De veras, en peor estado estaban los familiares de estas ¿rehenes?, a pesar de que se encuentran hospedadas en el hotel Meliá Caracas. Por ejemplo la madre de Clara Rojas y su hermano Iván le partían el alma al mundo, ¡cuántas lágrimas, cuántos sacrificios!.

También la hija y demás familiares de doña Consuelo, solo se les vio alegría cuando se enteraron por los medios audiovisuales que ya estaban en manos de la Cruz Roja.

Haciendo memoria y revisando los archivos fotográficos de la salida de William Niehous de su cautiverio, mucho más corto por cierto, no entendemos qué tipo de guerrilleros tenían a estas dos orondas damas. El pobre Niehous sin lentes y con un pelo blanco y largo, sin decir de la poblada barba.

Para los más jóvenes les recordamos a Richard Boulton, el esposo de la ex Miss Venezuela, Marena Bencomo. También el joven empresario venezolano estuvo en manos de los irregulares menos tiempo que estas dos damas y salió cual guerrillero barbado y peludo. Flaco y con un semblante que denotaban el hambre, la miseria a que fue sometido por sus captores.

Vamos más acá, ¿se acuerdan del cautiverio de Sergio Omar Calderón, el querido “Cura” Calderon?…bueno salió hablando de todos los Santos, de Dios, de la Virgen y con un rostro que denotaban la mala vida que llevó en un cortísimo tiempo.

Volviendo a las ¿secuestradas? Sentí como si ambas tenían en la espesa selva no solo a un buen peluquero, sino también a un modisto que les permitió cambiar de trajes en varias oportunidades.
Siendo honesta y, al estilo colombiano, siento que estamos ante un supremo montaje de alguien que usó a estas dos damas. Siento que estaban en manos de alguien desde hace algunos meses para robustecerlas (para cambiar la imagen de matones e irregulares de las FARC). Tal vez algunas de las fincas de “los oligarcas bolivarianos” sirvió de reclusión para el parapeteo de estas señoras que, repetimos, distan mucho de aparentar haber estado en manos de las FARC, asesinos de tantos buenos y honestos colombianos.

Que me perdonen, pero de que no tienen aspecto de haber estado secuestradas ¡no lo tienen!.. Recuerden los apretones y los besos a la hora de despedirse de sus captores. El tiempo dirá la verdad."


Nada no pasa nada. Liberaron de la manera más espectacular posible, en vivo y en directo, con más bombos y platillos que cordura, a dos de las más polémicas secuestradas por las FARC. Un proceso que tardo varios meses y que se inicio con la discreta sorpresa de la participación del presidente venezolano Hugo Chávez en el proceso de paz doméstico; sorpresiva puesto que han demostrado, con el presidente Colombiano, un comportamiento más cercano al de némesis, que al de aliado; sus gobiernos son diametralmente opuestos: Mientras uno vende todo a la empresa privada, el otro se cierra únicamente a sus fronteras; Uno censura públicamente al gobierno norteamericano y el otro es un fiel seguidor y simpatizante; a uno lo tildan de guerrillero, el otro aguanta estoicamente el mote de paramilitar. Creo intuir que existen dos historias como el fondo de un charco en la calle y las nubes que refleja.

La espectacularidad a llegado a límites altruistas como el que amenizó mis últimos almuerzos. Una señora, cuyo esposo está secuestrado; la mamá del secuestrado en Pitalito, Huila. El gesto caritativo del canal Caracol les brindo el único canal de comunicación posible, vía microondas, para que nuera y suegra pudieran compartir tan fatal misiva. Hasta ahí uno hasta se cree el cuento. Pero ¿Por qué tienen que transmitir eso en vivo y en directo a todo el país y a la señal internacional?, ¿Acaso es la única manera de sensibilizar al pueblo? Yo creo que no. No es necesario instalar antenas y cámaras en las salas de las familias secuestradas, ni transmitir 12 horas al día de lágrimas, cartas y cadenas. Que cada familia tenga el derecho a su intimidad, a sus lágrimas derramadas al lado del puesto vacío, al dolor quedito del alma que la televisión, encendida en la sala, nos arrebata en un acto también terrorista.

Acabo de leer que el periódico que El Tiempo se une a la marcha del 4 de febrero, promulgada por la página ociosa de facebook. ¿Será que habrá enviados y cubrimiento mundial de esta protesta individual, donde cada quien saldrá ese día a rechazar una guerra estúpida? Yo creo que sí. Y no hay que ser mago para saber que habrá declaraciones, comunicados, cartas, videítos con música melancólica en los noticieros, llamadas desde cualquier localidad a CityTv de gente quejándose pero que no hacen nada por vivir pegados al televisor. Oh Sábato, si la gente te leyera.

2 comentarios:

TATIANA dijo...

A mi no se me quita de la cabeza el pico efusivo, las manitos de la pequeña Juliana saludando y la señora Consuelo en su papel de Papá Noel entregando las pruebas como si fueran los trosnos. Estamos jodidos!

TATIANA dijo...

A mi no se me quita de la cabeza el pico efusivo, las manitos de la pequeña Juliana saludando y la señora Consuelo en su papel de Papá Noel entregando las pruebas como si fueran los trosnos. Estamos jodidos!